A modo de homenaje
. . .
A raíz de comentarios de algunos amigos coleccionistas, sobre ciertos
sobres (creo que han sido suprimidas imágenes al respecto), acerca de los que
se aseguraba que podría dar información, no puedo menos que comenzar por referirme
a un personaje que merece, pienso, ser recordado en el mundo de la filatelia
argentina reciente. Se trata de Alfredo LEVERMANN.
Y pienso que es merecido este sencillo homenaje por algunas de sus
condiciones personales. De las cuales muchas le valieron, en la más oscura
noche del conservadurismo de los noventa, no pocos enemigos. Pero su acendrado
patriotismo, su profunda fe, su fortaleza ante la adversidad (rayana, incluso,
en la tozudez), la claridad de sus principios (algunos de los cuales no comparto
pero reconozco como valores por su coherencia) le llevaron a encarar dos
tareas:
-
el
rescate y reconocimiento a los ex – combatientes de la Guerra de Malvinas (los
Veteranos del conflicto del Atlántico Sur -o como quiera mencionárselos-). A quienes entre
abril y junio de 1982 dieron su vida o perdieron definitivamente su
tranquilidad, lejos de sus hogares y sus familias, tomando para sí y sobre sus
espaldas una causa digna, más allá de la penosa “movida” de quienes los
comandaron.
-
la
defensa del Correo como símbolo nacional de emancipación y servicio para todos
los habitantes de la Nación.
A este respecto me comprometo aquí con otro aporte a la
brevedad.
Pero quiero dejar en claro ahora qué es lo que sí hizo Alfredo en
relación con las viñetas y gomígrafos de referencia.
Conocí al Sr. LEVERMANN por intermedio de otro recordado visitante a la Feria del coleccionismo del
Parque Rivadavia: el notable plástico Pedro CANTAMESSA. Brindaría con ellos y
por su bienestar sí, contra lo que imagino, los volviéramos a ver aparecer
caminando alrededor del Ombú.
Pier (CANTAMESSA) me lo presentó allá por fines de los años ochenta,
recomendándome que comprendiese (y acompañase en cuanto me fuera posible) sus
esfuerzos (siempre orientados a alcanzar fines honestos y altruistas). Tal vez
por eso (por contraposición, para ser más preciso), no tardó Alfredo en creer
que había descubierto historias tenebrosas de “irregularidades” en los errores
de emisiones filatélicas argentinas de la época y en el destino de las piezas
extranjeras correspondientes al “¿Museo Postal?”.
No había pasado mucho tiempo y Alfredo me hizo notar su preocupación
(en la que yo coincidía) en el olvido de (e incluso el desprecio por) los
sobrevivientes de Malvinas.
Y allí encaró una especial tarea: reunir y organizar las inquietudes de
las diversas asociaciones para desarrollar en el ámbito filatélico, piezas que
conmemorasen la gesta y el sacrificio de los caídos y veteranos.
Finalmente logró contactarlos, con lo que se propusieron editar viñetas
conmemorativas y gestionar gomígrafos y matasellos. El ámbito para su
presentación y venta al público (por valores muy módicos –pero un ingreso
valorable, en épocas en que no recibían ningún subsidio-) fue el stand de la Federación de Veteranos
de Malvinas en la Feria
del Libro. El resultado: esas piezas que han llamado la atención a algunos
foristas (*).
Las viñetas se hicieron imprimir sobre sellos relacionables con
Malvinas (flores de seibo y malvinense), principalmente, por lo que se buscó comprar
en cada caso algo así como unas dos o tres planchas.
Ceibo
Flor malvinense Lapacho
No sé por cuántos años y con qué aportes de LEVERMANN y otros vecinos
coleccionistas se puso en la calle esos “elementos”. Me han dicho que no mucho
más de cinco o seis. No sé tampoco cuántas viñetas fueron impresas . . . . ., muchas menos circuladas . . . . ..
De allí a que “valgan algo” hay un trecho enorme. Pero algunos las
valoramos por lo que fueron: otro homenaje a los olvidados . . . en un mundo en el que algunos sólo se
acuerdan de sus “negocios”.
(*) Foro de Filatelia Argentina (http://foro.filateliaargentina.com.ar).